Dragones y princesas


(...)
Vielleicht sind alle Drachen unseres Lebens Prinzessinnen, 
die nur darauf warten, uns einmal schön und mutig zu sehen. Vielleicht ist alles Schreckliche im Grunde das Hilflose, das von uns Hilfe erwartet.


Briefe an einen jungen Gedichter, Rainer Maria Rilke.



Hay momentos en la vida en donde, repentinamente, uno queda suspendido ante una encrucijada y en unos cuantos segundos uno vuelve a tocar tierra, estrellado o bien librado, después de haber decidido sobre uno y otro camino.

Lo que pasa en esos segundos ha sido uno de los temas que más me intrigan. Esos micromomentos en donde están contenidas experiencias con tanto peso como las primeras impresiones, el rayo, pasarte un alto, meterte coca por primera vez, ser infiel, responder un ataque... Esos momentos en donde se desdibuja la linea entre el impulso y la razón.

La semana pasada tuve uno de estos micromomentos y en esa pausa para decidir qué camino tomar, me vino a la mente este fragmento de Cartas a un joven poeta de Rilke. Otra vez Rilke. Quizás todos los dragones de nuestra vida son princesas que esperan vernos actuar con valentía y belleza (...)

Ese libro llegó a mi hace dos años y lo he leído unas tres o cuatro veces y hasta hace unos cuántos días me di cuenta en realidad cuan incrustado está en mi, diría incluso, que algunos otros fragmentos están también tatuados en el fondo de mi cabeza.

¿Actuar con valentía y con belleza?, ¿para qué?

Hay cierto poder y superioridad moral en actuar diferente al otro, en nadar contra corriente, en resistirse, en plantarse en medio de una tormenta de arena, en cargar la piedra angular del sentido de nuestra existencia... Pero también hay mucho cansancio y frustración, sobre todo, cuando el poder, la belleza y la valentía no tocan al otro y no hay nada más que hacer.

Tal vez el acto más valiente y más bello sea hacer las paces con todas las cosas faltas de justicia y sentido, todas aquellas cosas que están embebidas en el universo de la irracionalidad y lo inverosímil. Ese universo que también forma parte de nosotros.


The bravest man in the universe - Bobby Womack


Comentarios

  1. Qué chido, jaja, qué chido que puedas meterle literatura y música a una situación tan vulgar como la que te tocó vivir.
    Sí, tal vez el acto más valiente y más bello sea hacer las paces con todas las cosas faltas de justicia y sentido.
    Ah, y no entendí lo de los dragones.

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    Respuestas
    1. Yo creo que hay una canción para cada situación de la vida y se me hace divertido hacer la conexión. Al final, hay son temas que nos son comunes a mucho y alguien las hace canción.

      Los dragones son una metáfora de las "pruebas" o "problemas" de la vida.

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